Todos los dueños de perros con su DNI

IU acusó hoy al Ayuntamiento de Madrid de cobrar multas de hasta 300 euros a los dueños de perros que no llevan consigo el carnet de identidad de sus mascotas, pese a tenerlo en regla, lo que calificó de “un acto bochornoso que sólo pretende sacar dinero de debajo de las piedras tras los despilfarros de Gallardón y la posterior crisis”, informó hoy el partido.IU acusó hoy al Ayuntamiento de Madrid de cobrar multas de hasta 300 euros a los dueños de perros que no llevan consigo el carnet de identidad de sus mascotas, pese a tenerlo en regla, lo que calificó de “un acto bochornoso que sólo pretende sacar dinero de debajo de las piedras tras los despilfarros de Gallardón y la posterior crisis”, informó hoy el partido.La recaudación de esta sanción es para IU, “un acto de doble rasero”, puesto que “sólo se alude al cumplimiento estricto de la normativa cuando el que tiene que pagar es el ciudadano y, por ejemplo, el equipo de Gobierno tarda más del doble de lo que marca la ley en pagar a sus proveedores”.El grupo municipal de IU, que aseguró no entender el cobro de una multa sólo por que el dueño no lleve consigo el carnet identificativo de su perro, se preguntó “¿quién no lleva encima a todas horas, incluso en la piscina, la cartilla sanitaria y el seguro de responsabilidad civil del animal?”, y acusó al PP ” de saltarse las normas a su antojo”.Según IU, el espíritu de la norma, que surgió a partir de los desgraciados incidentes protagonizados por determinadas razas de perros, obliga a suscribir un seguro de responsabilidad civil por parte del dueño del animal. Además, recordó que la Comunidad estableció un catálogo de razas peligrosas que posteriormente derivó en obligatoriedad general hacia todas las razas.IU denunció que parejas de la Policía Municipal abordan a los vecinos cuando bajan al parque a pasear a su mascota y les requieren la documentación canina. El último caso se produjo el pasado 3 de julio, cuando se multó por falta leve con 300 euros a un ciudadano.El multado tenía todos los papeles en regla y seguro del hogar en el que se incluye el de su mascota, por entender que el seguro estaba caducado aunque se renueva anualmente de manera automática salvo orden del dueño en sentido contrario.